Tal como lo anunciaba en una nota de agosto del año pasado, ahora se presenta una nueva partida, un abandono, cada vez más la península se deshábita, y en esta ocasión le corresponde el turno a PTT, o mejor, al ahora Doctor PTT; porque se ha hecho doctor. El muy ladino se la pasó tres años por estos lares dedicado a hacerse con el título, y a bien que lo ha logrado. Se doctora en risa, o mejor, por la risa, o en razón de la risa y no es un chiste. Si alguien quiere saber a ciencia cierta cuál es la razón de tal dignidad, que se lo pregunte al susodicho, que yo no me meto, pero eso sí, no respondo por la salud mental del interesado!
Lo único que puedo añadir es que el hombre se ha dedicado a vivir de y para la risa. Se la pasa investigando, urgando, ideando, inventando o desarrollando o lo que sea, términos y teorias sobre la risa, por ahí le sonó la flauta y se hizo Doctor, de la nosequeología de la risa.
Así que una vez que la Universidad Complutense de Madríd ha logrado deshacerse del risólogo, otorgándole tan merecido título, el hombre recoge sus bártulos, o mejor, se los recogen para regresar al terruño; vuelve a la tierra que lo vio nacer -y que lo ha padecido durante tantos años- y no es que vuelva porque se haya quedado manivacío, o desocupado, nó, vuelve porque lo llaman, lo invitan, lo convidan, lo reclaman. Mejor dicho, vuelve porque le ofrecen chamba, curro, laburo; noooo, mentira, vuelve porque tiene "puesto" o "coloca", escritorio y silla. . .
Así que de nuevo, lo quindianos, en especial sus amigos y familiares, tendrán la suerte de tenerlo entre ellos, para departir y compartir, y sufrirlo, claro, que de eso se trata.
Buen viaje, exitos en la nueva labor y felicitaciones por la meta alcanzada, que gran esfuerzo le ha costado llegar; me consta!
Lo único que puedo añadir es que el hombre se ha dedicado a vivir de y para la risa. Se la pasa investigando, urgando, ideando, inventando o desarrollando o lo que sea, términos y teorias sobre la risa, por ahí le sonó la flauta y se hizo Doctor, de la nosequeología de la risa.
Así que una vez que la Universidad Complutense de Madríd ha logrado deshacerse del risólogo, otorgándole tan merecido título, el hombre recoge sus bártulos, o mejor, se los recogen para regresar al terruño; vuelve a la tierra que lo vio nacer -y que lo ha padecido durante tantos años- y no es que vuelva porque se haya quedado manivacío, o desocupado, nó, vuelve porque lo llaman, lo invitan, lo convidan, lo reclaman. Mejor dicho, vuelve porque le ofrecen chamba, curro, laburo; noooo, mentira, vuelve porque tiene "puesto" o "coloca", escritorio y silla. . .
Así que de nuevo, lo quindianos, en especial sus amigos y familiares, tendrán la suerte de tenerlo entre ellos, para departir y compartir, y sufrirlo, claro, que de eso se trata.
Buen viaje, exitos en la nueva labor y felicitaciones por la meta alcanzada, que gran esfuerzo le ha costado llegar; me consta!
Nota final, que no puede faltar, Carlos Alberto Villegas Uribe, más conocido en el mundanal ruido como PTT -que no sé ahora con título y cargo si se le pueda seguir llamando así cariñosamente- nacido en Calarcá, lo conozco y trato desde 1972, cuando coincidimos en la Escuela Girardot, en quinto de primaria, para reencontrarnos en le Colegio Robledo dos años más tarde, en tercero y compartir los estudios de bachillerato hasta graduarnos en 1978 (El primer Cartón, para el futuro tugurio). En 1980 volvimos a coincidir en la Coopetarativa de Caficultores del Calarcá, y cursamos estudios en la Universidad del Quindío de forma paralela, claro que él entró un poco antes, hizo una carrera más corta y obviamente se graduó con antelación (segundo Cartón). A partir de allí, si mal no recuerdo, él viajó a Bogotá, después volvió al Quindío y regresó nuevamente a Bogotá; eso si no garantizo fechas ni órden de desplazamientos, pero se la pasó entre las dos capitales durante varios años, mientras laboraba, que no es del caso precisar dónde ni con quién, porque yo no soy ningún chismoso, y algo tuvo que haber estudiado durante estos años, para seguir construyendo su tugurio intelectual; entre tanto yo, una vez terminados mis estudios universitarios, estuve al servicio de varias empresas, que tampoco es del caso precisar, lo que me llevó a viajar por medio país durante más o menos doce años; tiempo durante el cual de forma esporádica tuvimos oportunidades para encontrarnos y fortalecer nuestros lazosos de amistad. Llegado el final del siglo y con los albores de trecer milenio me radiqué en España, en Valencia, sobre el Mediterráneo y, lo que son las cosas, PTT vino a caer también por estas tierras, a Madrid y luego a Galapagar -lo mismo que el Pbro. Camilo Augusto Sánchez Herrera, que de Madrid pasó a la Seu d´Ugel, en el Pirineo Catalán, y de allí voló directo a la Central de Juventudes, en Bogotá- Ahora, después de recoger su último Cartón, ya con el tugurio casi terminado, él regresa a la tierra, mientras yo sigo anclado en este puerto; pareciera que ahora los caminos se bifurcan, después de las coincidencias habidas desde ese lejano 1972, ya veremos si el tiempo se encarga alguna vez de desmentirlo.
1 comentario:
No se si en mi alegría de sentir pasos de animal grane haya algún atisbo de masoquismo!!!
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