sábado, 5 de febrero de 2011

Sueños de amanecer

Ayer viernes, mientras me desplazaba la oficina -unos veinte minutos de recorrido en coche o carro que llaman- en medio del tráfico de la primera hora del día para atravesar la ciudad de Valencia, jugaban en mi mente recuerdos de futuro.
Bueno, mejor aclarar antes de que el entuerto se haga más grande; digo futuro, porque me recreaba en una imaginaria reunión que por no haber pasado, necesariamente tiene que ser del futuro y aludo a recuerdos, porque los rostros de los compañeros de reunión no se corresponden con lo que tienen los personajes hoy. Afirmación esta última que hago sin temor a equivocarme, por muy Berlusconi que se se las dé alguno (Que no hago referencia a nadie en particular, no tengo referencias, no recibos mensajes; así, el que se sienta aludido, que se mire al espejo).
Los reunidos éramos los bachilleres del Colegio Robledo de Calarcá en 1978, pero a pesar de los treinta y tantos años transcurridos, se paseaban en mi mente con los rostros que conservo de todos ellos, la gran mayoría en plena juventud!
Y es que no podía ser de otra forma, en nuestras mentes permanecen los rostros de los amigos y conocidos con las edades que tenían las últimas veces en que nos encontramos, y como a la gran mayoría de ellos no los veo desde la época del colegio, pues así permanecen. Con los cercanos o más frecuentados el paseo es distinto van madurando y transformándose a través de los años al mismo ritmo que uno, claro que algunos sacan ventaja, los demás se quedan como en una fotografía, inmutables.
En esto me distraía hasta llegar a la oficina, entonces, desconectar y de nuevo a la rutina.
Hoy he querido compartirlo con los que frecuentan o llegan por accidente a este sitio, bien lo canta Serrat:
"Los recuerdos suelen
contarte mentiras.
se amoldan al viento,
amañan la historia;
por aquí se encogen,
por allá se estiran,
se tiñen de gloria,
se bañan en lodo,
se endulzan, se amargan
a nuestro acomodo,
según nos convenga;
porque antes que nada
y a pesar de todo
hay que sobrevivir.
...

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